Las distracciones, el ruido, el flujo de personas y la falta de privacidad provocan estrés en el entorno laboral. Muchos trabajadores tienen dificultades para concentrarse en oficinas de planta abierta. Se necesitan 20 minutos para recuperar la concentración después de una pequeña distracción. La buena noticia: existe solución a este problema.

El ruido es el mayor inconveniente en las oficinas actuales: distrae, daña la capacidad de concentración y provoca cansancio al cerebro. Después de una jornada laboral, las personas deben tener suficiente energía mental para su tiempo libre y sus responsabilidades. Se espera que los espacios de trabajo respalden el bienestar y garanticen que durante las horas laborales se disfruten las condiciones adecuadas para un trabajo de calidad que permita mantener una reserva de energía. Los phonebooths son la mejor herramienta para esta necesidad.

Actiu
Actiu
Estel
Estel

La necesidad de silencio

El ruido reduce la resistencia y los estudios han demostrado que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Las interrupciones constantes cansan e incluso perjudican las funciones de la memoria a corto plazo. Según la investigación realizada por la compañía Framery, si un trabajo es altamente colaborativo, la necesidad de silencio es aún mayor.

El espacio debe gestionar el flujo de distracciones

Las distracciones son engañosas. Si tratamos de eliminar toda distracción en el ambiente de trabajo no habrá comunicación. Sin comunicación, la organización no trabaja hacia el mismo objetivo. Por lo tanto, deshacerse de las distracciones no es la respuesta. Más bien, se trata de aprender a manejar esas distracciones adecuadamente. Algunas de las “distracciones” son de gran utilidad para la organización, como el intercambio de ideas y la colaboración espontánea. Estas interacciones positivas se convierten en distracciones cuando se lleva a cabo en el espacio de trabajo equivocado o si el momento es inoportuno. Por lo tanto, eliminar todas las interacciones y distracciones no es el camino que se debe seguir.

Fantoni
Fantoni, cabinas Mini

Mejorar los espacios de trabajo es un proceso de diseño

En la práctica, se trata de conocer a las personas: ¿Qué les estresa, qué les provoca alegría y qué espacios necesitan para tener fluidez en el trabajo? Debido a que el estrés del entorno laboral tiene que ver con la interacción entre este y las personas, es necesario considerar lo siguiente:

1. Controlar las distracciones donde sea necesario minimizarlas.

Hay que mantener algunas zonas para interacciones y debates, mientras se disponen áreas tranquilas (con pantallas y paredes acústicas, cabinas telefónicas, espacios de biblioteca y espacios de equilibrio de colaboración y concentración).

actiu
Cabina fonoabsorbente de Actiu
2. Variedad.

Se trata de proyectar el espacio de trabajo centrado en el ser humano. Se deben identificar las necesidades y crear espacios para la colaboración formal e informal y para grupos grandes y pequeños. La variedad intencionada es fundamental para apoyar la variedad de personas que trabajan en el mismo espacio.

3. Protocolo en la oficina.

Significa que hay que predeterminar las formas de trabajar y decidir con todo el equipo las reglas comunes de la casa. Normas sencillas como qué salas de reuniones se deben reservar con anticipación, cuáles se pueden usar espontáneamente y qué áreas son compatibles con el ruido.

Estel
Collaborative room de Estel
Framery
Cabinas de Framery