Con el avance de la tecnología y la inteligencia artificial, muchos trabajos y profesiones han desaparecido y lo seguirán haciendo. Pero el gran interrogante hacia el futuro es si, cual película de ciencia ficción, el ser humano será reemplazado por robots en el plano laboral dejando a miles de personas desempleadas.

Para Kay Sargent, director of Workplace de HOK, hay una luz de esperanza. La diseñadora estadounidense se presentó en el Worktech organizado por Contract Workplaces en la Ciudad de México el 25 de junio con su charla “Inteligencia Artificial y experiencia humana” . Señaló que “la Inteligencia Artificial es más probable que reemplace tareas cognitivas, mientras que los robots reemplazarán tareas físicas o trabajos manuales. Pero hay una cantidad de trabajos peligrosos y sucios por los que deberíamos estar felices de que la robótica reemplace al ser humano”.

Según la especialista, la tecnología inteligente ya ha comenzado a reemplazar la labor humana en trabajos de producción y administración y, en un futuro no muy lejano hay muchos trabajos que serán reemplazados por la robótica. “Está estimado que la tecnología inteligente desplazará entre 75 y 100 millones de trabajos en la próxima década. Pero al mismo tiempo, la robótica creará más de 130 millones de trabajos durante el mismo período”, indicó Sargent.

Llega el cambio

Si la Historia nos ha enseñado algo, es que los avances de la tecnología cambian los trabajos, mejora la fuerza laboral y nos libera para hacer más trabajos significativos. La pregunta es: ¿Estamos posicionados para hacer el cambio hacia las nuevas posiciones que están siendo creadas?

En ese sentido, Sargent apunta a que el hombre debe nutrir las relaciones interpersonales y fortalecer aquellas habilidades propias del ser humano que las computadoras no podrán reemplazar. “Necesitamos enfocarnos en el nuevo balance que está siendo creado entre el hombre y la máquina. En este escenario, la gente es: «el arte del trabajo», aprovechando el juicio, las señales visuales, la empatía, la ética y la comprensión del contexto social.

La ciencia del trabajo

Y las máquinas son la «ciencia del trabajo»: utilizan habilidades computacionales, análisis de datos y reconocimiento de patrones. Las máquinas proveen datos, la evidencia estática y sugieren los lógicos pasos a seguir. Mientras que las personas focalizan en qué es correcto hacer. Para ser tan exitosos en eso necesitamos incrementar nuestras habilidades «soft», la inteligencia emocional y la interacción social. Necesitamos hacer crecer nuestras habilidades de liderazgo, negociación, pensamiento crítico, mentoreo, adaptación, entrenamiento y nuestra habilidad para conectar significativamente con cada uno de los demás. Estas habilidades van a empoderar a la próxima generación de trabajadores para lograr el crecimiento del factor humano para balancear y complementar la cuarta revolución industrial, la era cognitiva”.

Perspectiva

De acuerdo a un artículo recientemente publicado por The Economist titulado «Índice de preparación para la Automatización», Corea del Sur, Alemania y Singapur son líderes en el mundo en cuanto a su preparación en robótica en Inteligencia Artificial. Pero varios países de Europa están cerca. En Estados Unidos, Canadá y China, están también haciendo grandes inversiones en tecnología inteligente.

Latinoamérica

En Latinoamérica, Argentina se encuentra en el número 17 del ránking, seguida por Brasil en el 19, Colombia en el 20 y México en el 23. Pero como en México el sector de la manufactura crece y atrae inversiones del exterior, la automatización robótica también crecerá en consecuencia. Especialmente, en los automotores, el aeroespacio, la electrónica, y el sector de la aparatología médica donde el uso de la robótica puede reducir costos, mejorar la consistencia y calidad y la seguridad de la fuerza de trabajo. Y, como en otras culturas, el uso de la Inteligencia Artificial puede ayudar a mejorar la productividad de los empleado. Proveyendo los análisis de datos y las evaluaciones necesarias para que las personas puedan tomar mejores decisiones basadas en datos.

Texto extraído de la conferencia “Inteligencia Artificial y experiencia humana”, presentada por la diseñadora estadounidense Kay Sargent en Worktech, organizado por Contract Workplaces en la Ciudad de México el 25 de junio.