Gaz Arquitectos diseña unas oficinas en Galdakao, en un espacio pequeño y con poca luz. Lo protagonizan las cortinas de aluminio anodizado de Kriskadecor. Recorren las dos paredes longitudinales de forma sinuosa pero homogénea, proporcionando fluidez y vibración con iluminación de luces LED, que cambia sutilmente a lo largo del día.

Kriskadecor, Gaz Arquitectos

GAZ Arquitectos recibió el encargo de diseñar las oficinas de la empresa constructora Elorrin, de Galdakao, Vizcaya. Se disponía de un espacio reducido y con poca iluminación natural donde alojar un importante número de puestos de trabajo.

Elorrin buscaba que no pareciera una oficina convencional, sino un espacio fluido donde las mesas se configuraran como espacios de trabajo agrupado, en islas centrales.

Y, como protagonista, un elemento continuo. Las cortinas de aluminio anodizado de Kriskadecor, que recorren los dos muros longitudinales de forma sinuosa, pero homogénea. Aportando fluidez y vibración gracias a los brillos y facetados. Incluyen iluminación progresiva de luces LED, que cambia sutilmente a lo largo del día.

Kriskadecor, Gaz Arquitectos

Se disponía de un espacio de muy reducidas dimensiones, donde había que alojar un número importante de puestos de trabajo. El local disponía de un gran fondo con poca superficie de fachada, y poca iluminación natural.

Se necesitaba una gran zona de almacenamiento o archivo lineal, impresoras y todo tipo de maquinaria de ofimática.

Además, se transmitió a los arquitectos que no “pareciera una oficina al estilo convencional”. Se buscaba un espacio fluido en sus bordes en el que los puestos de trabajo se configuraran como lugares mas estáticos y calmados.

Soluciones adoptadas

Kriskadecor, Gaz ArquitectosPara solucionar el proyecto se tomaron varias decisiones fundamentales que caracterizan radicalmente el resultado.

Las mesas se configuran como espacios de trabajo agrupado, en islas centrales del local. Adquieren formas adiamantadas y geometrías contundentes. A lo largo de los dos muros longitudinales, desde un extremo al otro del local se dispone de un elemento continuo. Una cortina de cadenas metálica Kriskadecor que recorre todo el local de forma sinuosa y contínua. Aportando esa fluidez y dando una gran homogeneidad al fondo del local, a la vez que lo inmaterializa, y le aporta una vibración debido a sus brillos y facetados.

Todo el local es de color negro, incluida la fachada y el protagonismo se cede a la cortina metálica que con una iluminación progresiva de leds va cambiando sutilmente a lo largo del día.