El antiguo Hospital Prinsengracht de Ámsterdam se transforma en unas elegantes oficinas colaborativas para Fosbury & Sons. El proyecto del estudio belga Going East pretende recuperar la grandeza de la edificación original aportando una visión del entorno del trabajo cercana a la de una galería de arte.
Fosbury & Sons, compañía belga de coworking, ha abierto nuevo espacio en el antiguo Hospital Prinsengracht en Ámsterdam. El edificio, catalogado como monumento nacional, se ha transformado por completo en unas oficinas flexibles de 6000 metros cuadrados elegantemente diseñadas por el estudio Going East, con salas de reuniones inspiradoras, espacios para eventos y un restaurante donde empresarios, trabajadores y clientes pueden reunirse.
Edificio histórico
«Es nuestra primera ubicación fuera de Bélgica», dice Stijn Geeraets, cofundador de Fosbury & Sons. “Está destinada a convertirse en un centro empresarial líder en Ámsterdam. Mientras buscábamos ubicaciones adecuadas, conocimos a los propietarios del edificio, Millten y Million Monkeys. Como socios, optamos por una empresa conjunta para operar la antigua Prinsengrachtziekenhuis. Es un sueño que hayamos podido ocupar este hermoso edificio junto al canal, con tanta historia. Evidentemente, lo tratamos con el mayor respeto y nos propusimos convertirlo en un lugar especial para las empresas locales, un ambiente profesional y acogedor».
Restaurar la antigua grandeza
El emblemático local ofrece espacio para más de 250 empresas y emprendedores. Compañías como Blendle, Van Moof, TicketSwap, Ace & Tate, Top Notch, Tony Chocolonely, The Media Nanny y Temper se encuentran entre los primeros miembros de Fosbury & Sons Prinsengracht. El diseño interior del edificio reformado por MVSA ha sido realizado por el estudio belga Going East, con el objetivo de restaurar la antigua grandeza de la estructura hospitalaria.
Junto a las elegantes oficinas y salas de reuniones, los miembros pueden reunirse en el Fosbury & Sons Café que ocupa 230 metros cuadrados junto a un jardín interior idílico protegido.
Obras de arte
Además del diseño materializado en las piezas de estilo nórdico escogidas para el equipamiento, el arte juega un papel fundamental en este proyecto. Los espacios comunes están adornados con obras de arte y fotografía modernas.
“Decidimos reinstalar el parqué en las suites, tal como habíamos visto en fotografías antiguas», dice la diseñadora de Going East, Anaïs Torfs. “Teníamos la intención de recrear una auténtica atmósfera de palazzo italiano junto a los canales. Destacamos los hermosos arcos y algunos de los techos en ruinas que se han conservado intencionadamente”.
El resultado es un interior donde los contrastes son el centro de atención: lo antiguo frente a lo nuevo y lo clásico frente a lo moderno, junto con detalles en mármol de colores, ricos tejidos de lana y diseños vintage.
Arte en palacio
En diferentes espacios de este coworking se exhiben esculturas del artista estadounidense Nick van Woert, seleccionadas por la Grimm Gallery. Además, se presentan obras de Koen Hauser que presentan una visión audaz y contemporánea de la naturaleza muerta. También, una serie de obras de arte personalizadas de la artista Sarah Yu Zeebroek agregan un toque belga. Los muebles utilizados son de Vitra y Hay. Las lámparas de suspensión son de Areti y los objetos decorativos de Seletti.
Going East toma la inspiración del espacio de las imágenes antiguas para evocar un palazzo italiano. Se combinan elementos de línea recta limpios, como las puertas, las piezas de mármol y las luces de tubo con los elementos sofás suaves y sillas curvas. Los mármoles de varios colores, los techos dramáticos, la pintura al fresco, los muebles descatalogados y la iluminación teatral buscan ese efecto.
Ficha técnica:
- Fosbury & Sons Ámsterdam.
- Proyecto: Going East.
- Dirección de proyecto: Anaïs Torf, Michiel Mertens.
- Equipamiento: Areti, Seletti, Vitra, Fabre, Hay.
- Texto Marco Brioni.
- Fotografía Francisco Nogueira.
