En el piso 48 de un rascacielos de Shenzhen, Cheng Chung Design crea un Centro de Experiencias Vitales a modo de jardín chino que agrupa oficinas, cafetería y salas de arte. Al combinar el espíritu lúdico de la exploración con elementos tecnológicos, el proyecto muestra una radiografía creativa del diseño actual.
Este es un espacio de trabajo que subvierte el diseño de oficina tradicional. El área de dos pisos, casi dos mil metros cuadrados, de este rascacielos de Shenzhen alberga, además de oficinas, una decena de espacios con funciones variadas. Estamos en una de las capitales de la Great Bay Area china, una zona de la provincia de Gong Dong que agrupa nueve ciudades hiperdinámicas, incluyendo Hong Kong, Macao y Dongguan.
Accedemos a este espacio misterioso
El jardín chino clásico funciona como complejo de arte diversificado que integra literatura, pintura, caligrafía, tallas, bonsái, teatro… Y, además, proporciona un entorno ideal para una variedad de actividades culturales como poesía, música, canto, pintura que mejoran los intercambios culturales en todos los ámbitos. El proyecto hereda el encanto de los jardines chinos clásicos e interpreta las tradiciones con una lectura actual. Este espacio puede considerarse como un complejo de arte moderno.
El pasillo brilla cuando se abre la puerta del ascensor. Está flanqueado por rejas de bambú respetuosas con el medio ambiente que ayudan a crear un contexto tranquilo y elegante y le dan al espacio «un sentido del tiempo».
Atmósfera acogedora
Cheng Chung Design quería crear una atmósfera acogedora y relajante en la cafetería. Esta área contiene vegetación, paisajes al aire libre, luz solar, elementos de estilo industrial, así como pinturas llamativas que la hacen parecer una pequeña galería de arte. En este entorno sofisticado se ofrecen servicios, suave música de jazz, comida deliciosa y placenteras experiencias multisensoriales.
El diálogo de los muebles, la conexión cercana de diferentes escenas y la mezcla de atmósfera moderna y vintage permite a las personas apreciar el atractivo de la Gran Bahía mientras degustan un café.
Las escaleras, no solo conectan la planta cuarenta y ocho con el área de oficinas situada en la planta superior, sino que también funcionan como un anfiteatro para actividades educativas, ya que el estudio Cheng Chung Design es también centro de formación de la Academia de Bellas Artes de Guangzhou. Las conferencias sobre estética y estilo de vida se celebran regularmente.
Gastronomía oriental
La cocina abierta, al otro lado de la cafetería, incorpora la cultura de la gastronomía oriental. Es un espacio para tomar algo o cenar en un buffet que muestra la versatilidad del Centro de Experiencias. La cocina conecta a las personas y les permite comunicarse de manera relajante. La comida deliciosa, los vinos refrescantes y el hermoso paisaje urbano atemperan el ambiente, disuelven la tensa atmósfera de negocios y generan un ambiente acogedor y hogareño.
La disposición de diversos muebles en el área de la oficina rompe con la distribución convencional y crea una circulación con giros y vueltas, como en los jardines chinos clásicos. Hay grandes escritorios y salas de reuniones con forma de caja de cristal. La sutil división espacial hace que cada sección sea independiente pero conectada entre sí. Todo el espacio abraza la luz del sol que entra por las ventanas.
Un paseo por la memoria
Las paredes de vidrio transparente hacen que las habitaciones parezcan flotar en el aire. Ligeras y divertidas, estas estructuras son una combinación perfecta de funcionalidad y estética.
Se pueden admirar distintas luminarias, pavimentos, muebles de diferentes marcas. El Centro Cheng Chung Design invita a un paseo por la memoria y muestra el mundo desde la perspectiva de un coleccionista que ha viajado sin descanso. Hay una instalación de arte con una milenaria cabeza de Buda proveniente de Tailandia, alfombras hechas a mano en Turquía, sillas y objetos antiguos de estilo chino cuyo origen no se puede rastrear. Un espacio caleidoscópico y mágico que convierte lo intangible en tangible y crea infinito a partir de lo finito.
Clásicos del diseño
En la cafetería se descubre una colección de artículos clásicos de diseño de todo el mundo, como la emblemática butaca de los Eames que produce Vitra, la chimenea Focus, la Wooden Chair de Marc Newson que produce Cappellini, la motocicleta clásica y los libros de arte. Cada objeto, sin importar cuán grande o pequeño sea, tiene su propia historia y condimenta el espacio.
La escultura de madera Big Fish, colocada en uno de los laterales de la planta, llama la atención por su tamaño. El cuerpo poderosamente oscilante y los ojos penetrantes del pez inyectan vitalidad en esta área de ambiente académico. Esta obra de arte también se refiere a la nueva submarca de CCD: Fish Eye Design (FED).
La sala de muestras y materiales de la oficina superior tiene ya una reputación en el sector en China y se ha utilizado como un plató para filmación de videos de promoción de empresas en varias ocasiones. Las exhibiciones se distribuyen a lo largo de la pared para que los visitantes puedan apreciarlas mientras caminan por la larga galería. Cada una es un producto novedoso y creativo estrictamente seleccionado por CCD en base a la tecnología más nueva y la sostenibilidad.
Ficha técnica:
- A Boundless and Ideal Life Experience Center.
- CCD Headquarters.
- Shenzhen ICC Tower, Futian CBD, Shenzhen, China.
- Proyecto: CCD / Cheng Chung Design .
- Texto Marco Brioni.
- Fotografía CCD.
